Tomado de Naturaleza indómita
La sed es una sensación que Zucco conoce bien; a pesar de la humedad del bosque su cuerpo clama por las refrescantes aguas del río, del líquido que gotea de hoja en hoja llenando la fruta descompuesta y colmando las vastas áreas pantanosas, los que también fluye en las venas de cada criatura del bosque.
Pero cercano a donde quiere beber yace una boa constrictor que brilla entre la vegetación descompuesta en el piso del bosque; en tamaño es la segunda serpiente más grande del Amazonas, después de la mortal anaconda; las más grandes pueden crece hasta quince pies. Sus cuerpos compuestos de poderosos anillos de músculos, se enrollan alrededor de sus víctimas, lentamente sofocándolas hasta la muerte.
Para asustar a sus enemigos la boa emite un siseo amenazante, lo cual generalmente es suficiente para desalentar a los más débiles y los más impresionables atacantes… como a Zucco, quien perturbado se niega el líquido refrescante y se retira apenado. Se estremece, su encuentro con la boa le dejó fuera de sí; Calhoa parece observar las acrobacias de su compañero condescendiente.
Para asustar a sus enemigos la boa emite un siseo amenazante, lo cual generalmente es suficiente para desalentar a los más débiles y los más impresionables atacantes… como a Zucco, quien perturbado se niega el líquido refrescante y se retira apenado. Se estremece, su encuentro con la boa le dejó fuera de sí; Calhoa parece observar las acrobacias de su compañero condescendiente.
La repentina agitación de Zucco por la boa, saca de su letargo a Calhoa. Los jaguares están activos el 60% del tiempo y más a menudo en la noche, pero la cacería, el pescar o simplemente un refrescante baño, puede ocurrir en cualquier momento; Calhoa espera un baño tranquilo pero Zucco tiene otra idea: el quiere jugar y lanza un ataque sorpresa…
La pelea entre dos jaguares es sólo un combate ritual. Su propósito es el de validar el balance de poder entre ellos y deja claro que dentro de la jerarquía natural de las especies, algunos dominan y otros deben de someterse; para Zucco, quien el primero en retirarse, está claro desde el día en que se encontraron que él simplemente no representa reto para la fuerza de Calhoa.
Zucco impaciente espera a que Calhoa regrese para continuar jugando, pero sintiendo que su compañera está cansada de jugar, Zucco se retira; es mejor emboscarla cuando ella menos lo espera, pero ella se aleja en busca de tranquilidad y comienza a limpiar su pelaje…